Porque no apareces, te llamo desde mi soledad,
te nombro desde mi hombro
donde tantas noches sentías mi calor.
Mientras mis dactilares jugaban en tus cabellos
y el tránsitar me llevaba por ardientesde puntos "G",
sentiendo tu caudal de emociones.
Mencionabas mi nombre en tus labios resecos
pronuciando la oración infinita, que no olvido.
Sumergidos en la grandeza del amor,
recorri tu silencioy ahora cual centinela nocturno,
refugiado en estrellas busco en la soledad de tu ausencia.
Quizás te has quedado tendida en Isla Negra
esperando la tinta verde que he robado al poeta
para volver a marcar nuestros nombres,anunciando
una bandera de Suecia, nos espera.
Seguro estás preguntando a las olas
cual es el mensaje de tu enamorado.
Y en mi agonía, lamento que no entiendas
el léxico de las frias aguas del Pacífico
donde sigo escribiendo mis versos.
Pronuncio en cada mañana tu nombre en
oleajes de frios colores verdes-azules e infinitos.
Más el tiempo de volver a la realidad me despierta,
solo para seguir soñando en ese peregrinar marino
donde tu ya no estás...
Te has convertido en la soledad infinita de mis sueños
añorando sigas siendo mía por siempre.
Porque en las noches seguiré viajando hacia tí
Niña de mis ojos, mariposa taciturna
invade este silencio con tu presencia,
para devolverme la vida, en tu calor y tu aliento.
Navagaré, desde el Báltico a Isla Negra,
bucando tu amor... Aún a costa de seguir sufriendo.
