Arelis

Fue tu piel... la que me dijo paciencia. Mientras caminé por los mundos de Dios te pensé y esperé.

Cuando nadie estaba a mi lado, también te sentí. Reí con tus cosas, y te escribí en mis poemas. Navegamos en un corazón... pero yo con mi dolor...

Incógnita ?

Tenerte y no tenerte. Esperanza agonizante, En el paso fugitivo de la mía tristeza, mientras esperé a que regresaras...

Más el tiempo me traicionó, me quedé tendido a orillas del Río Cristalino y la tarde como tantas otras se llenó de pájaros, de mariposas, pero ya más nunca pude volver a tocar tu piel...

Se fue con la corriente río abajo. Entre piedras lavadas y verdes ramas. Así se escondía para siempre mi sueño de acariciar tu piel niña yaguarapareña de la sucrense región del Golfo de Paria.

Nelson Urra, verano de 1982